miércoles, 31 de octubre de 2007

Callo

Callo, para ver si consigo escucharme.
Callo, para que reposen las palabras,
se estén quietas de una vez
y poderlas recoger.
Callo para entenderte.
Para aclararme.
Ordenarlas.
Y ver si el resultado es una verdad rotunda o un galimatías.

lunes, 29 de octubre de 2007

2 amigos

A veces me desmorono.

Como los títeres de hilo cuando se deja caer la cruceta.

Pero pasa algo, o llega alguien, y con un mimo me "morona" de nuevo.

Las dos líneas que vienen son un flash-back.

En la terraza. Una comida sencilla, de trabajo y de lujo al mismo tiempo.
- Es como si fuéramos ricos
- Es mejor.

El sol de otoño en la cara.

¿Quién quiere un yate de 20 metros si tiene 2 amigos?

domingo, 14 de octubre de 2007

Arreglos

Hay en mi barrio un establecimiento de arreglos de ropa al que recurro principalmente cuando tengo algún problema con los bajos.

El problema con los bajos consiste, casi siempre, en que hay que cogerlos.

La dependienta, una mujerona muy felliniana, lo denomina así: "cogerte los bajos". Y por tanto yo lo considero tecnicismo: "coger a uno/a los bajos".

La dependienta me tutea desde el primer día. A mí me parece natural. Si yo gastara esa talla de sujetador y ese metro ochenta y cinco tutearía hasta al Ministro de Agricultura.

Mi experiencia me dice que siente predilección por los jerseys de punto de cuello vuelto, que le realzan la figura. Y también por las rebequitas abotonadas con cuello de pico que le quedan de infarto. No he conocido otra mujer en mi vida a quien le sienten mejor las rebequitas.

Alguna vez llevo otra cosa que no son pantalones, y entonces, sin previo aviso, aparecen términos como sisa, bies, pespunte, remetido, dobladillo.

No la entiendo.

Pero le guardo devoción.

Y me fío de sus puntadas como si fuera cirujano.

Si no, ¿de qué iba yo a poner mis bajos en sus manos?

jueves, 11 de octubre de 2007

DD.DD.CC.

Voy dejando que languidezca el día,
que se callen los vecinos,
que se aplaquen las urgencias.

Entonces me quito las corbatas.
Ésas que me agarran del cuello,
también las que me atan las manos a la espalda.

Y me nacen dos alas,
dos pies descalzos que hundir en el barro.
Algunos días incluso más.

Me lleno la cabeza de sonrisas como océanos,
de notas musicales,
también alguna mujer medio desnuda.
No lo voy a negar.
¿Qué es una mujer medio desnuda
sino un cóctel de sonrisas, océano y notas musicales?
Acantilados, viento en la cara.

No es fácil escribir poesía con una cartera encima de los hombros.
No es fácil ver el mar en los ojos blindados de un notario.

La boca seca, el corazón humedecido;
florecen mis manos acariciando palabras y acariciando te.
Entonces sé que soy un poco Drácula, bastante bebé.

Y me hace falta que languidezca el día,
que se callan los vecinos,
que se me calman las urgencias
para sentir deseos desordenados y ciegos.

lunes, 8 de octubre de 2007

Dar

No tiene mucho fundamento
pero cuanto más doy más tengo.

Risas, amores,
canciones, picardías...
siendo generoso se multiplican.

Mi piel para que la toques
Para encender la tuya, mi sonrisa.

Crece la vida de usarla y de gastarla,
crece y crece la vida
de vivirla.

Mudanza

Han pasado 7 años y pico desde que nació a2manos . Y ha sido una de las experiencias más emocionantes de mi vida. Auténtica, arriesgada...