Pequeñas historias, melodías de insomnio, mensajes en envases de aire, días de tristelicidad...
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Escribiendo en la cama
Estoy escribiendo en la cama. Tú duermes. Hace mucho calor esta primera noche del verano. Es por eso que has apartado la colcha de un...
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Siempre he estado a disgusto conmigo mismo, lo suficiente como para no dejar de rascarme. Siempre he estado a gusto conmigo mismo, lo sufi...
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Luisito, el hijo de los de la mercería, estudiaba mecanografía . Todas las tardes le veíamos cruzar la calle con su carpeta azul Centauro , ...
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Me he levantado esta mañana contento. Cantando cosas del Dúo Dinámico que debieron quedar fosilizadas en los rincones de la memoria como pe...
A veces lo que pasa es que no la queremos entender. Será porque no nos conviene, digo yo. O porque no le conviene a ella.
ResponderEliminar(Soy consciente de que aún no os he desvelado cierto misterio referente a un encuentro en el que solo participé yo ;-) pero en serio que no tengo acceso a vuestro buzón desde ninguno de mis ordenadores... Esa circunstancia y la vida, que me deja pistas pero también me arrastra a veces como el viento a las hojas, ha hecho de momento imposible ponerme en contacto.
Siento dejar el mensaje aquí y espero tener un rato para dejarlo en otro sitio, si soy capaz de conseguirlo...
El Baldwin sigue sonando.
Muchos saludos!)
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminary menos la pronunciación.
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