lunes, 27 de marzo de 2006

La hora perdida

Escucho sin parar desde hace días una canción que me entusiasma... "adónde irán los besos que guardamos, que no damos"... Tengo ganas de besar a todo el mundo... femenino. Uno tiene sus reservas. Tengo ganas, decía, de besar sin parar para que no me caduque un sólo beso. Tengo la sensación de que los besos que se dan tarde ya no son besos, son inútiles.

En estas andaba hoy por la mañana cuando me ha dado por pensar que me han robado una hora. Llena de besos, quizá. Mi reloj pasó de las dos a las tres de la mañana en décimas de segundo. Y el tuyo, aunque no lo cambiaras hasta las cinco de la tarde. Todo lo que pudo pasar en ese tiempo no pasó. Todo lo que nunca hubiera pasado, tampoco. Escribo ahora y me imagino ese niño o esa niña que lloró en la primera milésima de segundo del cambio horario. ¿Cómo le hacen la carta astral? ¿Los astros cambian de hora? Supongo que no, no tienen problemas energéticos. ¿O sí? ¡Yo qué sé! Y mejor que no le hagan la carta astral, que siempre dicen que Capricornio con Leo no funciona. Mienten.

No sentí nada especial. Ni el pelo se me movió por el acelerón hacia la hora siguiente ni mi gin-tonic se consumió ipso facto, ni... No, nada.

Tengo un problema: ¿qué hago con todos los besos que guardo y que debí dar entre las dos y las tres de la madrugada del 26 de marzo de 2006?

7 comentarios:

  1. A grandes problemas grandes soluciones.
    Mira no solo se ha perdido una hora sino que además estamos sin luna.
    La cuestión es guardar esos besos y desplegarlos todos como bombas trazadoras en la hora suplementária cuando la vuelvan a cambiar.
    Todo el mundo sabe que los Capricornio van bien con los Cáncer.

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  2. Un beso es parte de la eternidad
    echa un momento.
    en el agujero negro del interior de la boca,
    los besos como las estrellas,
    siguen brillando mucho después de desaparecidos...
    para los besos no hay tiempo,
    el tiempo desaparece en los besos...
    los besos no caducan,
    se intensifican o suavizan ,
    y con el paso del tiempo,
    se hacen sonrisa en los labios.

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  3. ¿Me los das a mí? Yo también lo necesito... Cuánta pasión se echa en falta...

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  4. Siempre me he sentido afortunado en el caso de "la hora perdida" porque nací en verano y primero disfruté de la hora que se gana cuando comienza el otoño.
    Primero la disfrutas y después, en el siguiente solsticio, la devuelves.

    En este caso, ganas una hora de besos,
    son besos a cuenta,
    besos a crédito.

    Yo particularmente, prefiero pagar a plazos y con intereses.

    De todas formas, es verdad, a mí me falta esa hora de besos, de necesitada pasión.

    Espero que vuelva en el siguiente equinoccio.

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  5. Perdón, donde dije solsticio, quise decir equinoccio

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  6. Lo que pasa que andas escuchando a Víctor Belén y Ana Manuel y quieras que no pues eso.

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¡Muchas gracias por comentar!

Mudanza

Han pasado 7 años y pico desde que nació a2manos . Y ha sido una de las experiencias más emocionantes de mi vida. Auténtica, arriesgada...