Oigo el reloj que hay encima de la puerta de la calle.
Pasan los segundos. Son muy pocos los que me molestan.
Menos aún los que me duelen.
Los más vienen y se sientan a hacerme compañía.
Soy un duende gordito grande rodeado de infinidad de duendes gorditos minúsculos.
Te ven pasar y uno te dice: dónde vas cargada con tantos noes, no me extraña que te duela la espalda.
Sigue el reloj escupiendo duendes como si fueran las pipas de las uvas.
Siguen viniendo ellos a sentarse a mi lado.
Ellos son los que encienden los despertadores, los que mueven las campanas, los que mandan parar y arrancar a los trenes.
Me gusta su compañía porque a pesar de que saben lo poco que duermo, a pesar de que muchas veces les llego tarde, tienen una sonrisa, un tictac al compás, un puedes-contar-conmigo.
Pequeñas historias, melodías de insomnio, mensajes en envases de aire, días de tristelicidad...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Escribiendo en la cama
Estoy escribiendo en la cama. Tú duermes. Hace mucho calor esta primera noche del verano. Es por eso que has apartado la colcha de un...
-
Siempre he estado a disgusto conmigo mismo, lo suficiente como para no dejar de rascarme. Siempre he estado a gusto conmigo mismo, lo sufi...
-
Luisito, el hijo de los de la mercería, estudiaba mecanografía . Todas las tardes le veíamos cruzar la calle con su carpeta azul Centauro , ...
-
Me he levantado esta mañana contento. Cantando cosas del Dúo Dinámico que debieron quedar fosilizadas en los rincones de la memoria como pe...
Si me lees eso en voz alta... Me caso contigo. He dicho.
ResponderEliminar¿cómo de alta?
ResponderEliminarMis duendes también son jodidillos, tiran a dar.
ResponderEliminarOtras veces se portan bien y me miman, me acunan y hasta me ponen cachondo.
Los días que no están, son días sosotes , los echo de menos...
"...cómo de alta?"
ResponderEliminar...uhm...eso es un 'sí', o un 'quizás'...?
Si bien tengo facilidad para pedir matrimonio, o la tenía, no me acuerdo. Reconozco que nunca le he pedido la mano a un/a anomimo/a por internet.
ResponderEliminarOye, que lo mismo es cosa de probar.
¿"te miro" dónde te habías metido?
ResponderEliminarNo me he ido.
ResponderEliminarSigo aquí.
Bien, yo soy anónima para tí. Tú para mí no. Sé que eres la mano izquierda.
ResponderEliminarPero piensa que me tendrás que leer todas las noches. Facilona no soy...
Preferiría que me la pidieras por fax, pero internet me vale.
Lo mismo es cosa de probar, como tú dices...
Te miro, me da que en este comentario estás de más.
ResponderEliminarDéjales solos...